En Hidalgo siguen usando el "detector molecular" ADE651

Como recordará, el fabricante de los ADE651, Jim McCormick, fue condenado a 10 años de prisión por fraude, por vender éste y otros juguetes, y poco después su ex socio y fabricante del también fraudulento GT200, Gary Bolton, obtuvo una condena de siete años por los mismos cargos. Los distribuidores en México de estos aparatejos, Segtec S.A. de C.V. para el GT200 y Battery Network S.A. de C.V. para el ADE651, nada tontos, han eliminado de sus sitios web cualquier referencia a sus antiguos socios británicos: Global Technical Ltd. y ATSC UK Ltd., medida que personalmente considero exagerada pues dudo mucho que alguna de sus víctimas considere siquiera hacer algo contra ellos.

A diferencia de otras ocasiones, la noticia de las condenas de McCormick y sobre todo, de Bolton, salió ya no sólo en la primera plana de algunos diarios —hay que enfatizar el caso de El Universal gracias a los buenos oficios de Laura Castellanos— sino hasta en la televisión, en donde el mismo portavoz de temas de seguridad del gobierno federal, Eduardo Sánchez, tuvo que decir en el noticiero de Carmen Aristegui que ya no se usan para nada, lo cual, al menos según la Secretaría de la Defensa Nacional, es una mentira, pues en su reciente informe de labores afirmó que los sigue usando en sus retenes.

A nivel estatal quién sabe cómo estén las cosas. Del GT200 sabemos que en Chiapas el procurador Raciel López Salazar defiende su uso y efectividad; en Guanajuato se hacen bolas pues mientras el secretario de seguridad pública, Álvar Cabeza de Vaca dice que van a investigar, la secretaria de transparencia y rendición de cuentas, Isabel Tinoco Torres, dice no saber nada sobre tal investigación. Y nada más, del resto de los usuarios en México no he sabido nada en firme, aunque sospecho que se siguen usando por aquí y por allá.

En cuanto al ADE651, la situación de sus tres víctimas conocidas en México es la siguiente: en Sinaloa se les "perdió" y el nuevo secretario de seguridad pública, Genaro García Castro, declara no saber nada de esos aparatos; en Colima, el gobernador Mario Anguiano Moreno, después de las explicaciones de  Luis Mochán, y sobre todo ante los resultados de la prueba que hicieran Alfredo Aranda, coordinador de ciencias de la Universidad de Colima y Ricardo Saenz, director de la Facultad de Ciencias de la misma universidad, con todo dolor de su corazón, al fin admitió que no funcionan y hasta mencionó que quizá haya alguna acción legal al respecto, y en Hidalgo, bueno, de eso va esta entrada:

El pasado 15 se septiembre fui al centro de Pachuca, a la feria que se suele poner con motivo de las fiestas patrias. La idea, además de comer un pozole, era comprobar que ya se habían dejado de usar para cuidar a la gente estas inútiles varitas de zahorí. Después de todo y visto lo que he relatado someramente arriba, era lo más lógico esperar que ya los hubieran desechado. Pero no, vacunados contra la inteligencia como en Irak, donde siguen usándolos para buscar bombas, la policía hidalguense sigue haciendo el tonto con sus ADE651, comprados —los primeros de ellos al menos, porque quién sabe cuántos tengan en total— cuando nuestro ahora secretario de gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, era gobernador de Hidalgo. Aquí está la foto, tomada ese día:

Medio descuadrada porque yo estaba en otra cosa cuando de repente me pasaron por enfrente

Como nota al margen, es interesante mencionar que al menos hasta donde he podido investigar, no ha habido una sola mención en la prensa hidalguense sobre el fraude que representan estos aparatos, y mucho menos se ha dicho una sola palabra acerca de su empleo por parte de la (s) policía (s) en el estado.

A.T.
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P.D. Escribiendo esta entrada me entero que Damián Canales Mena, antiguo titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo y uno de tantos apantallados por los "detectores moleculares" ADE651 (ver ejemplos A, B, C), es ahora jefe de la División de Investigación de la Policía Federal. Que Godzilla nos agarre confesados.