The Holey Vagina Mary, obra original de
Heather Buchanan, tiene detrás una peculiar historia de censura, pues, contrario a lo que
uno esperaría, los espantados fueron... unos ateos.
Ateos de de Cuernavaca, para más señas.
Aunque
este escándalo ocurrió en febrero, yo,
aparte de mencionar el asunto en Twitter en su momento, me la guardé para hoy, que es su día.
A.T.